Caminando por Tierra de Pinares. Desde Samboal a Arroyo. Segovia

Volver a Samboal me hace sentirme bien por todo lo emocional que trae consigo el lugar donde he pasado gran parte de los veranos de mi vida. Pero esta vez me hacia especial ilusión además de otras muchas cosas que ahora no vienen a cuento…por le ganas que tenia de patearme unas cuantas rutas. Decidido y preparado, el sábado cuando me levante y con la fresca de la mañana, me puse las botas y recorriendo las calles de Samboal me puse como objetivo llegar hasta Cuellar. Eran unos diecinueve kilómetros que pretendía realizar campo a través y las calles de Samboal, siempre hacen que me rezague un poco. Cojo Valentín Unceta, para seguir por las traseras y dar hasta las afueras del pueblo y encontrarme con el campo en todo su esplendor.

El día es perfecto, un sol que ilumina, pero no molesta engrandezca con su luz el paisaje. Voy a buen ritmo, pero con el espíritu de un paseo y por los caminos de arena y tierra, voy vislumbrando nuevos cultivos, pinares y un sinfín de sonidos que los diferentes pájaros que habitan este campo ponen la música a este recorrido. No me hacen falta otras canciones, estas que escucho ya me animan el paso.

Por momentos la tierra se emblandece y debo caminar del bies, para no estropear los surcos de algunos sembrados por donde me veo obligado a pasar.

Samboal queda a tras y ya comienzo a ver Narros, una población que se encuentra a escasos 4Km. Quizás haya andado alguno mas, no solo por el tiempo invertido, sino por que un arroyo con el que me tope, me obligo a dar un gran rodeo, ya que su caudal, me impedía pasar al otro lado.

Una vez en Narros y paseo por sus calles y fotografió el bar de la entrada del pueblo, su iglesia y alguna de sus calles que por alguna razón que desconozco me llamaron su atención. El azulejo que hace reseña de los antiguos familiares que ocuparon esa casa en la calle principal de Narros, me hace sonreír un poco y me doy cuenta que la gente ya no ríe tanto, o al menos a mi me lo parece, por que cuando van a reírse algunos se tapan la boca, como si estaría mal reír. Bueno, pues con una sonrisa y algunas fotos como al de la parada del autobús y mucho campo…sigo mi camino y en la salida de Narros, veo a la izquierda una ermita que es mi próximo objetivo.

Antes de lo que esperaba me veo junto a la loma donde se sitúa la Ermita de San Marcos y con un par de fotos, sigo el camino campo a través.

Me vuelve a ocurrir lo mismo y intentando recurrir al ingenio, me veo imposible para atravesar un arroyo del que desconozco su nombre pero trae un ancho de mas de tres metros que me obligan de nuevo a dar un rodeo y esta vez me devuelve a la carretera, al asfalto…

Paso el cruce donde hay una fabrica de embutidos y sin reparar mucho en ella continuo camino por la carretera hasta llegar en un plis-plas hasta Arroyo.
Allí veo que me estoy quedando sin batería en el móvil , que para mi es una utilísima herramienta donde grabo además de videos, los audios de lo que veo y las fotos que luego publico en el blog.

Veo una tienda, de esas que en los pueblos pequeños venden de todo y entro por una manzana. Al ir a pagar con un billete de 5 euros, la mujer que tras el mostrador me ofrece la manzana, me dice que no tiene cambios, ya que la manzana al peso me salía por 0,35centimos de euro.

Acordamos que me la regala y le saco una foto para agradecerla su confirmada. Se llama María Antonia y cuando te invitan a una cosa, parece que te sabe mas rica.

Mordiendo la pecadora manzana deambulo por el pueblo y con las fotos de rigor y muy poca gente o casi nadie por las calles…sigo la ruta. Al volver a la carretera me veo con Isabel que en coche va rumbo a Cuellar para hacer la compra semanal. Y ahí se acabo mi ruta, que espero acabar en breve, por que según vi a Isabel, saque una foto a un panel que me hablaba de un curios camino llamado el Paseo de la Reina… El caminar, el pasear me hacen reencontrarme conmigo mismo, estableciendo un dialogo sincero y real que me encanta. Y esto me fastidia, por que en estoy acostumbrando a caminar solo y el día que alguien me acompañe igual me convierto en un "raro".

Pero bueno, hasta que esto suceda, que nos quiten lo andaoooo….

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